... Zygmunt Bauman (Amor Líquido)

< Mujer - Varón >; 
entrégate < varón - mujer >, 
pero antes de entregarte a una relación en su totalidad desfachatez
 pregúntate si vale la pena entregarle tu vida al otro,
pregúntate si estás dispuesto a morir !


¡En el amor se puede entrar sólo una vez como en la muerte!.


¡En el amor individual no se encuentra satisfacción [...],
 sin verdadera humildad, coraje, fe y disciplina!
Pero en una cultura en la que esas cualidades son raras, 
la conquista de la capacidad de amar, será necesariamente un raro logro!
Sin humildad y coraje no hay amor,  pero en lo que a el se refiere la posesión, 
el poder, la fusión y el desencanto; son los cuatro jinetes del Apocalipsis!.

Según Bauman enamorarse una y otra vez, tanto el desenamorarse
 no es otra más que la propia insatisfacción interna,  un vacío requerido llenarse con lo que
comúnmente llaman "amor" su nombre real es: 
< una incapacidad aprendida >. 

¡El amor como el nacimiento se puede
 lograr sólo una vez como la propia muerte!.
 Quien a amado verdaderamente, sabrá lo que es adentrarse en terrenos desconocidos.


¡Por más que uno haya aprendido sobre
el amor y sobre amar, su sabiduría sólo
llegará, al igual que el mesías de

Kafka, un día después de su llegada!.


 No hay justificación para quien diga "volveré amar cuantas veces sean necesarias", 
quien tenga estas sílabas en boca y pensamiento es porque nunca a podido
 llevarlo consigo mismo, no a podido lograr eso que se llama "amor",
 amor propio.

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Ziygmunt Bauman, premio Príncipe de Asturias de Comunicación 
y Humanidades 2010 (junto a Alain Touraine), nació en 1925 en Poznan, 
Polonia. Sociólogo, filósofo y ensayista, su investigación, 
entre otras cosas enfocada en la modernidad, le ha llevado a definir 
la forma habitual de vivir en nuestras sociedades modernas 
contemporáneas como “la vida líquida”. 


Una vida caracterizada por no mantener un rumbo determinado, 
pues al ser líquida no mantiene mucho tiempo la misma forma. 
Y ello hace que nuestras vidas se definan por la precariedad y la incertidumbre.
 Así, nuestra principal preocupación es no perder el tren de la actualización 
ante los rápidos cambios que se producen en nuestro alrededor 
y no quedar aparcados por obsoletos.


¿Nos conocemos realmente a nosotros mismos? 

¿Vivimos realmente lo que queremos vivir? 


 Quizás la falta de respuestas a estas preguntas
 es lo que nos hace navegar sin rumbo por la vida. Vivir,
 como dijo en su discurso de recogida del Premio Príncipe de Asturias Zygmunt Bauman,
 (…) en un mundo donde la única certeza es la certeza de la incertidumbre, 
en el que estamos destinados a intentar, una y otra vez y siempre de forma inconclusa, 
comprendernos a nosotros mismos y a los demás, destinados a comunicar, 
con y para el otro”. La sociedad líquida produce triunfadores egoistas
 (El nuevo modelo de héroe es el triunfador que aspira a la fama, al poder 
y al dinero…, por encima de todo, sin importarle a quién se lleva por delante. ) ...        

  Zygmunt Bauman define "amor líquido" como aquella sociedad donde
 las condiciones de actuación de sus miembros cambian antes de que las formas 
puedan consolidarse en unos hábitos y en una rutina determinada. 
Esto, evidentemente, tiene sus consecuencias sobre los individuos 
porque los logros individuales no pueden solidificarse en algo duradero, 
los activos se convierten en pasivos, las capacidades en discapacidades
 en un abrir y cerrar de ojos.⁠⁠⁠⁠



 ¿qué es la modernidad líquida?

Sociedad líquida!.

               

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